El 3 de octubre de 1964 se hizo la primera transmisión de una emisora. Por eso, en el distrito se celebra el Día de la Radiodifusión Pilarense. Aquellos nombres que hicieron historia.

Ireemplazable compañera en gran cantidad de hogares, la radio es quizás el medio de comunicación más querido por su público. En Pilar, sus inicios tienen una fecha definida: 3 de octubre de 1964, día en que se realizó la primera transmisión local.

Por eso, desde hace más de una década el 3 de octubre fue decretado “Día de la Radiodifusión Pilarense”, como un homenaje a aquellos pioneros y a las emisoras que a través de los años se convirtieron en un familiar más.

“A mediados de los ’60, las únicas AM que podían escucharse en el distrito eran las provenientes de la Capital Federal. Por aquel entonces, el Consejo Nacional de Radio y Televisión (CONART) consideraba que con eso era suficiente”, explicaba hace unos años Guillermo Dolera, fallecido en 2016 y uno de los iniciadores de la radio local. Sin embargo, en algunas ocasiones se otorgaban permisos temporarios para que los municipios pudieran cubrir sus fiestas populares.

Así fue cómo, en el marco de las Fiestas Patronales de 1964, un grupo de jóvenes pilarenses se decidió a insistir en la concesión de una de estas licencias: el ya mencionado Dolera, Miguel Murad, Reinaldo Sapucci, Jorge Roncoroni, Vicente Zucca, “Beto” Pinheiro y José Pérez fueron algunos de esos “locos de la azotea” vernáculos.

Un no identificado, Miguel Murad (con anteojos), Guillermo Dolera (derecha). Mira sonriente “Lucho” Gabriele..

Ese fue el nacimiento de Radiodifusora Impulso, cuya corta vida abarcó del 3 al 12 de octubre de ese año, transmitiendo desde el primer piso del Club Atlético. Se le asignó la sigla LT 20, una frecuencia de 1440 kilohertz y una potencia de 100 vatios. Su eslogan fue “Acompaña, educa, entretiene, informa”, objetivos que cumplió holgadamente.

Fugaz

En conversación con El Diario Regional, Reinaldo Sapucci recordaba tiempo atrás que “efectivamente, como decía el CONART, las emisoras nacionales llegaban con buena sintonía, pero no se interesaban por lo local. Después de insistir, logramos esos diez días”.

El período alcanzó para, por ejemplo, transmitir parte del show de Héctor Varela, cubrir la llegada en helicóptero del gobernador Marini (que bajó en la vieja cancha de Atlético) y transmitir de la 1º edición de la Fiesta de la Flor, en Escobar. Sobre este evento, “Beto” Pinheiro –quien ofició de operador- rememoraba que “llovía torrencialmente, pero igual hicimos el enlace en vivo. En esa época, era una proeza”.

Fueron diez días únicos, en los que Pilar al fin había logrado tener una radio propia. Muchos vecinos se sumaron a la movida, como el intendente Andrés “Yayo” López o la docente Edith “Chicita” Fortez, quien dio una mano como locutora. Radiodifusora Impulso tuvo una vida corta pero dejó una huella imborrable.

Años dorados

Si bien era apenas un adolescente, Oreste Foglia logró en la década de 1930 que el Municipio le permitiera instalar altoparlantes en la plaza 12 de Octubre con el objetivo de pasar música en las tardes. El “estudio” estaba montado en el Salón de Sesiones del HCD, y constaba de un micrófono y dos bocinas. La transmisión arrancaba con un fragmento de “El barbero de Sevilla”.

Radio Foglia Publicidad tenía parlantes distribuidos en distintos lugares de la ciudad, como el Club Sportivo Pilar, la esquina de Lagrave e Ituzaingó; e Ituzaingó e Independencia. Más cuatro bocinas dobles en la plaza.

También a principios de los ’60, Roaldo Barbesini fundó una emisora que pasó a la historia de los medios de Pilar: Radiodifusora América. En sus primeros tiempos, se emitió a través de una serie de altavoces instalados en el centro de la ciudad. Pero, en 1969, una reglamentación sobre ruidos molestos ya no permitió el funcionamiento de los altavoces, por lo que los propietarios –en ese momento Barbesini compartía la emisora con Omar Gómez- eligieron transmitir por un sistema de circuito cerrado.

Gladys Mendoza, locutora de Radiodifusora América.

Así, hasta su último día América se oyó por medio de aparatos receptores ubicados en las casas y comercios, conectados con la emisora por un tendido de cables. Sus primeras locutoras fueron Liliana Forte y Gladis Mendoza, y en 1972 la radio protagonizó un hecho sin precedentes, al organizar un maratón de 24 horas de transmisión, a beneficio de la Guardería Municipal.

Radiodifusora América apagó su voz en diciembre de 2007, tres años y medio después que falleciera su creador. Su nombre está indudablemente asociado al del inolvidable Roaldo Barbesini.

El boom

A partir de la segunda mitad de la década de 1980, la FM “invadió” el dial y Pilar no fue la excepción. Uno de los impulsores en la zona fue Héctor Maggiani, con FM Estudio 2, con influencia inicial en Del Viso y La Lonja.
En la localidad cabecera del distrito, en marzo de 1987 nació FM Pilar 103.9, de la mano de Fabio Gómez. “Transmitimos durante tres años en Martitegui y Lauría –recordaba Gómez años atrás-, en la casa de Hugo Romani. Luego se trasladó a la galería Lonquimay –donde hoy está la peatonal-, para salir durante tres años más, hasta que un robo de los equipos transmisores obligó a cerrar las puertas”.

El 8 de julio de 1988, Guillermo Dolera –aquel pionero de Impulso- le dio vida a FM Plaza 92.1. En 1997, con la llegada de El Diario Regional, al poco tiempo se fusionó con el periódico para darle forma al multimedio.

De Dolera y sus amigos en el Club Atlético a los “modernos” de la Frecuencia Modulada, de los parlantes de Foglia y Barbesini a la radio a través de Internet, las emisoras locales han acompañado a los vecinos desde hace 60 años. Vaya, entonces, un homenaje a la vieja y querida radio pilarense.

Conocénos

No son leyendas, ni se aplica el rigor del historiador: está compuesto por relatos sobre vecinos, personajes y sucesos que marcaron al distrito a lo largo del tiempo, especialmente en el sigo XX.

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